Alcázar de Toledo

El Alcázar de Toledo es una fortificación que, gracias a su privilegiada situación sobre una colina, ha sido un enclave militar estratégico muy importante.

Legado multicultural

El Alcázar de Toledo fue construido como un cuartel del ejército romano en el siglo III. Posteriormente, tras la llegada de los visigodos, fue convertido en la capital del reino y se construyeron a partir de entonces numerosas residencias a su alrededor.

No fue hasta la dominación musulmana a partir del 711 cuando se le llamó Alcázar (que significa "fortaleza" en árabe). De este movimiento histórico, nacen obras y estancias arquitectónicas de estilos árabes, impulsadas por Abd al-Ramán II y Abd al-Ramán III, el primer califa omeya de Córdoba.

Durante la Baja Edad Media, bajo el mandato de Alfonso VI, la fortaleza se embelleció considerablemente, unificando las culturas que habían pasado por ella: los árabes, judíos y cristianos.

El hecho de que se trate de un edificio que ha pertenecido a diferentes culturas, hace que su estilo arquitectónico sea complejo y variopinto: su fachada occidental es de estilo renacentista, la del este es medieval, con sus torres y defensas cilíndricas almenadas, la del norte es gótica plateresca, y la última, la del sur, es de estilo churrigueresco o gótico anticlásico.

El Alcázar y la Guerra Civil

Durante el inicio de la Guerra Civil Española (1936-1938), el Alcázar fue utilizado como punto defensivo y de resistencia por el coronel José Moscardó y la Guardia Civil, frente a un asedio sobre el fortín de las fuerzas republicanas. El asedio duró un total de 70 días, hasta el 28 de septiembre de 1936, cuando fue liberado por José Enrique Varela y visitado al día siguiente por Francisco Franco.

Pese a que el Alcázar quedó muy destruido tras la contienda, fue restaurándose a lo largo del tiempo y el Franquismo lo convirtió en un símbolo de heroísmo durante la Guerra Civil. Aún hoy, se pueden ver balas clavadas en sus muros, que hacen eco a uno de los períodos más oscuros de la historia de España. 

Qué salones ver en el Alcázar de Toledo

El interior del Alcázar de Toledo se divide en numerosas dependencias y salones que determinan la belleza y el sentido histórico del lugar. Algunos de los más importantes son los siguientes:

• Salón de armas blancas. Se trata de una sala que rinde homenaje a la tradición de espadería toledana, y donde se puede aprender y observar la evolución del arma blanca.
   
• Salón de armas de fuego. En este espacio se pueden encontrar armas de fuego del siglo XX como fusiles, ametralladoras, pistolas, etc.
   
• Salón de maquetas. Esta sala es especialmente significativa, porque en ella se puede ver el Alcázar en planta, mediante maquetas, que muestran la fortaleza antes y después del asedio, durante la Guerra Civil, junto a fotografías históricas y otros objetos de interés.  
   
• Despacho Moscardó. Se trata de la única estancia que se conserva tal y como estaba durante la Guerra Civil Española.
   
• El Alcázar alberga el Museo del Ejército desde el 2010, por consiguiente, si te consideras amante del género, no dudes en visitar las dependencias de este equipamiento cultural que depende del Instituto de Historia y Cultura Militar del Ejército de Tierra. 

Visita el Alcázar de Toledo

Considerado Bien de Interés Cultural, el Alcázar ha sobrevivido a numerosas guerras e invasiones que le han aportado valor e interés cultural e histórico, hasta convertirlo en lo que es en la actualidad: un verdadero imprescindible de la visita a Toledo. 

Para llegar hasta él de la forma más sencilla puedes aprovechar el autobús hop on hop off, que tiene paradas en otros sitios fundamentales como la Puerta Bisagra y el Mirador del Valle. ¡Será un gran aliado a la hora de moverte por la ciudad!

• Reservar billetes para el autobús turístico Hop on Hop off de Toledo