Castillo Troja

El Castillo Troja es un palacio barroco del siglo XVII, construido al estilo de las villas romanas y rodeado de un precioso jardín de inspiración francesa.

Historia y arquitectura del castillo de Troja

El palacio nació como la residencia de verano del conde Wenceslao Adalberto Stanberg, en ese entonces consejero del emperador Leopoldo I, Mariscal del Reino. El conde estaba fascinado con la belleza de las villas italianas y quiso trasladar parte de ese encanto a su propio hogar de verano.

El diseño final fue realizado por el arquitecto francés Jean Baptiste Mathey, aunque Domenico Orsi estuvo originalmente a cargo del proyecto. Algunos de los mejores artistas y artesanos de Europa trabajaron en el castillo para lograr su refinado estilo. Las obras, que se realizaron en diferentes etapas, comenzaron en 1679 y culminaron recién en 1703.

El edificio principal cuenta con una planta en U y alberga una gran Sala de Honor a dos alturas. El edificio está enmarcado por dos torres que sirven de miradores a los preciosos jardines.

Tesoros del castillo de Troja

Lo mejor del palacio se encuentra sin duda en su interior, decorado con frescos y esculturas impactantes.

La pintura más espectacular de todas se encuentra en la Sala de Honor, y es una obra de los hermanos Abraham e Isaak Godyn, artistas de Amberes que en el año 1690 llegaron al palacio y dejaron su arte plasmado por más de tres siglos. Los frescos que decoran el techo y las paredes y representan el triunfo de los Habsburgo contra los turcos en Viena.

Los jardines

Otro de los grandes atractivos del Castillo Troja son sus hermosos jardines de estilo francés, a los que se llega por una doble escalinata bordeada por esculturas que representan a los Titanes luchando contra los dioses del Olimpo. La obra fue realiza por Geog y Paul Hermanns, artistas de Dresde.

Los jardines están decorados por grandes floreros de terracota, estucos, bustos de emperadores y una fabulosa fuente central.